Padre mío Obatalá,
Rey de reyes yo te llamo,
tu que reinas en el cielo
nos das gloria y esperanza.
Padre mío Obatalá,
tu que reinas en el cielo
nos das gloria y esperanza.
Padre mío Obatalá,
Creador, origen del mundo,
Padre de todos los santos,
Padre de todo los bueno,
Padre de todos los santos,
Padre de todo los bueno,
de todo lo que es blanco,
nos traes la tranquilidad y la paz.
nos traes la tranquilidad y la paz.
Padre mío Obatalá,
dame sabiduría y seso
dame sabiduría y seso
para entender, para comprender,
dame la palabra justa
dame la palabra justa
para quien quiera escucharla,
paciencia y la resignación,
paciencia y la resignación,
para poder sobrellevar
las dificultades y dolores
que en mi camino aparezcan.
Padre mío Obatalá,
dale tranquilidad a mi espíritu
cuando la ira inunde mi ánimo,
y no me dejes perjudicar
dale tranquilidad a mi espíritu
cuando la ira inunde mi ánimo,
y no me dejes perjudicar
a quienes comparten conmigo
el esplendor de la vida.
Dame Padre mío, tu bendición,
para soportar con altitud
lo que mi karma me depare,
porque solo yo lo forjé
lo que mi karma me depare,
porque solo yo lo forjé
o dejé que lo hicieran otros,
porque solo yo he de repararlo
porque solo yo he de repararlo
con tesón y buenas obras,
siendo justo y cabal,
siendo amable y generoso.
Padre mío Obatalá
Padre mío Obatalá
cuida mucho de mí,
y también de mi familia,
de noche y de día vigilia,
y con tu manto protector
de noche y de día vigilia,
y con tu manto protector
cúbreme si desfallezco,
atrae hacía mí lo bueno,
lo blanco y puro,
tráeme la buena salud
y con ella la alegría,
la prosperidad y la abundancia,
pues yo confío en tu poder,
creador y soberano
del firmamento estrellado,
de las aguas y las tierras,
de las luces y las sombras,
y de todo ser viviente
que en los mundos habita,
por tu poder y tu gloria
seas por siempre alabado.
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