Esta es la Santa Cruz
donde murió nuestro Señor.
Padre San Silvestre,
del monte mayor,
te ruego libres mi cuerpo
y mi casa de todos malhechor,
brujo, hechicero, ladrón,
de hombres y de mujeres de mal vivir,
de todo lo malo que deseen
para mí y mi familia,
mis enemigos visibles e invisibles,
no me puedan vencer.
Al Sagrado Corazón de Jesús,
pido que al echar el azúcar en este riego
que según se endulce, endulce
mi porvenir y el de mi familia.
Al Sagrado Corazón de Jesús,
pido que al echar el azúcar en este riego
que según se endulce, endulce
mi porvenir y el de mi familia.
Pido en nombre de Santa Teresa de Jesús,
que al echar la Albahaca,
se espante todo lo malo
que haya dentro de mi casa y de mi familia
y se aleje para no volver jamás.